Día del Trabajador

Por: Raul Bretón

Día Internacional de los Trabajadores. Lejos han quedado los sueños de aquellos trabajadores estadounidenses de Chicago que fueron ahorcados en 1886 por pedir jornada laboral de ocho horas para poder dedicar otras ocho a la familia y las otras ocho para dormir. Pasan los años y cada vez tenemos menos tiempo para la familia mientras disminuye la calidad y cantidad de nuestros sueños. La vida moderna se inventa cada día necesidades innecesarias que obligan al ser humano a ir al límite de sus capacidades físicas e intelectuales para cubrir deudas y gastos cotidianos. Ya no es extraño trabajar entre 12 y 14 horas o sumar 60 horas por semana. Lo peor de todo es que aquellas conquistas laborales han ido desapareciendo con el paso del tiempo. Cada vez menos derechos para el trabajador y más poder para el empleador con sindicalistas que responden a los intereses de gobiernos y empresarios que pactan nuevas leyes que van en detrimento del ciudadano de a pie, ese que representa el motor económico de la sociedad, son cómplices de la moderna esclavitud que viven muchos. A pesar de todo, Feliz Día del Trabajador a todo aquel que se levanta con el alba para poder llegar a fin de mes. 'Que nada está escrito para siempre'.